-Profesión valorada.
Aunque no en su salario, similar al promedio de los países de la OCDE, que no España, la profesión de docente en Finlandia es una de las más valoradas por la sociedad. Existe un sentimiento ampliamente extendido de que son expertos en su materia y de que van a consagrar su vida a la educación.
-Formación inicial cuidadosa.
Todo profesor debe ser titular de una maestría, en nuestro caso, para ser "class teachers" necesitamos una maestría en Ciencias de la Educación. Todos deben pasar un tiempo relativamente largo en situaciones reales de enseñanza.
-Una selección exigente.
No solo se tienen en cuenta los conocimientos teóricos y el historial académico de los postulantes, sino que también se tienen en cuenta el concepto que ellos mismos han formado sobre su futuro oficio y el conocimiento que tienen sobre la infancia.
Los "class-teachers", nuestro equivalente en Finlandia tienen que someterse a diversas pruebas. Se hacen cargo del nivel 1 al nivel 6 de la educación. Además de obtener la "matriculation examination" deben haber tenido también alguna experiencia con niños trabajando como ayudantes en escuelas o colegios durante 3 años. Durante dos días los postulantes son sometidos a pruebas y tests, siendo uno de los más importantes el "test de grupo" durante el cual deben debatir en grupos de 6 sobre un tema de la educación frente a un grupo de observadores.
-Tiempo moderado de trabajo, pero gran dedicación
En Finlandia un profesor debe impartir de media 20 horas de curso semanales (45 min cada clase), además de cuidados de patio, participación en grupos de trabajo disciplinares o interdisciplinares etc... Además, es normal en casa que el profesor acuda a casa de los alumnos para comprobar de primera mano sus condiciones de vida, tarea muy importante y que en otros países es o bien llevado a cabo por un asistente social (Francia) o que solo es llevada a cabo en situaciones límite (España).
-Material de gran calidad
Los profesores Finlandeses gozan de unas condiciones materiales extraordinarias. Además de una baja carga docente, con un máximo de 25 alumnos por clase, estas son espaciosas y totalmente equipadas con modernos equipos. Esto incluye desde el primer nivel hasta el último, situación que en España todavía sigue siendo uno de los grandes atrasos. Aulas pequeñas, clases de 30 alumnos para arriba etc..
-Gran libertad pedagógica.
Una vez pasadas las difíciles pruebas de selección, los profesores gozan de una libertad pedagógica total y un alto grado de autonomía. Ellos dicen que esto es muy importante para mantener la motivación de los docentes.
Aunque no en su salario, similar al promedio de los países de la OCDE, que no España, la profesión de docente en Finlandia es una de las más valoradas por la sociedad. Existe un sentimiento ampliamente extendido de que son expertos en su materia y de que van a consagrar su vida a la educación.
-Formación inicial cuidadosa.
Todo profesor debe ser titular de una maestría, en nuestro caso, para ser "class teachers" necesitamos una maestría en Ciencias de la Educación. Todos deben pasar un tiempo relativamente largo en situaciones reales de enseñanza.
-Una selección exigente.
No solo se tienen en cuenta los conocimientos teóricos y el historial académico de los postulantes, sino que también se tienen en cuenta el concepto que ellos mismos han formado sobre su futuro oficio y el conocimiento que tienen sobre la infancia.
Los "class-teachers", nuestro equivalente en Finlandia tienen que someterse a diversas pruebas. Se hacen cargo del nivel 1 al nivel 6 de la educación. Además de obtener la "matriculation examination" deben haber tenido también alguna experiencia con niños trabajando como ayudantes en escuelas o colegios durante 3 años. Durante dos días los postulantes son sometidos a pruebas y tests, siendo uno de los más importantes el "test de grupo" durante el cual deben debatir en grupos de 6 sobre un tema de la educación frente a un grupo de observadores.
-Tiempo moderado de trabajo, pero gran dedicación
En Finlandia un profesor debe impartir de media 20 horas de curso semanales (45 min cada clase), además de cuidados de patio, participación en grupos de trabajo disciplinares o interdisciplinares etc... Además, es normal en casa que el profesor acuda a casa de los alumnos para comprobar de primera mano sus condiciones de vida, tarea muy importante y que en otros países es o bien llevado a cabo por un asistente social (Francia) o que solo es llevada a cabo en situaciones límite (España).
-Material de gran calidad
Los profesores Finlandeses gozan de unas condiciones materiales extraordinarias. Además de una baja carga docente, con un máximo de 25 alumnos por clase, estas son espaciosas y totalmente equipadas con modernos equipos. Esto incluye desde el primer nivel hasta el último, situación que en España todavía sigue siendo uno de los grandes atrasos. Aulas pequeñas, clases de 30 alumnos para arriba etc..
-Gran libertad pedagógica.
Una vez pasadas las difíciles pruebas de selección, los profesores gozan de una libertad pedagógica total y un alto grado de autonomía. Ellos dicen que esto es muy importante para mantener la motivación de los docentes.
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